Duelo de Titanes

Son entre los mejores del mundo, sin duda los mejores de la planeta, cuando se habla del Real Madrid y el Barça, pues todo el mundo se presta atención al tema, no por tener en sus filas los mejores y carísimos jugadores del mundo actualmente, si no por la historia de ambos.
La liga esta al rojo vivo, a tres jornadas del final, y a un punto que separe los dos combinados, cada uno espera al otro con una lupa, el Barça ganó el sábado al Villareal por un contundente cuatro a uno, con doblete del gran Messi, el Real Madrid jugó ayer, pero con ya una preocupación de no pinchar, y eso lo que costo, a los chicos de Pelligrini, un ex madridista como el entrenador del Osasuna José Antonio Camacho, dejaron al Madrid en apuros, hasta el último pulso, para ganar el partido con la calidad y la persistencia del Portugués Cristiano Ronaldo, otra vez hay que esperar el siguiente partido, que cada equipo lo da por una final, hasta el Barça que juega con decimoctavo de la tabla, no se fía del Tenerife, porque había un día este mismo equipo ha dado la liga al Barça, ganando al Real Madrid en la temporada 91/92, entonces el Tenerife si quiere o puede, tiene que devolver lo que a Cesar a Cesar, y así no se queda en deuda con el Real Madrid.
El partido del miércoles frente al Mallorca, otro grande de nuestra liga, con sus buenísimos resultados, con una victoria merecida en San Mamés, el técnico Manzano, ya sabe como manejar su vestuario, y como echar humo a las estrellas del Madrid, sobre todo para el presidente Florentino, en la temporada 05-06, por una derrota de 2-1, el actual presidente de la entidad blanca, justo después del partido anuncio su dimisión, ya vuelve el hombre blanco a su lugar maldito.
El Real Madrid no tiene nada en sus manos, nada más ganar y esperar que su rival pinche, pero lo mismo piensa Guardiola, que para su equipo es el único título a combatir, para devolver el agradecimiento a la afición Blaugrana, las cosas están muy tensas en las dos casas, y la liga más grande del mundo está a un punto de encender, o de éxito y fracaso para el campeón que ganó todo la anterior temporada, o un éxito y gran triunfo, o fracaso, para un club que gastó 250 millones para hacer nada más exhibiciones el verano pasado en la pasarela del Santiago Bernabéu.
La liga sigue siendo la pasión, de las dos aficiones, y en todo el mundo.